Hoy quiero compartirte el mensaje de ayuda que me envió una consentida:
«Bernard, me quitaron la vesícula, pero el dolor no se va. Pensé que la cirugía terminaría con mis problemas, pero no. Me pregunto si volveré a ser la misma de antes. Ayúdame a entender, por qué me duele la vesícula si ya no la tengo«
Si estás viviendo lo mismo, sigue leyendo para conocer las razones detrás de ese malestar persistente en un lugar que ya no debería doler y qué hacer.
¿Qué es la vesícula y cuándo se debe extirpar?
La vesícula es un pequeño órgano en forma de pera que vive debajo de tu caja torácica derecha. Su trabajo es guardar la bilis, un líquido que segrega tu hígado.
¿Por qué es importante la bilis? Pues, es como un jabón que ayuda a tu cuerpo a deshacer las grasas de la comida y absorber cosas buenas como vitaminas y ácidos grasos omega.
La intervención quirúrgica para extraer la vesícula se llama colecistectomía y podría ser necesaria si:
- Tienes cálculos biliares o “piedras”, trocitos de bilis que se vuelven duros en la vesícula, causándole dolor.
- Si esas “piedras” se mueven y bloquean los conductos de la bilis.
- Tu vesícula se inflama, lo que es muy doloroso.
- Encuentran crecimientos extraños (pólipos) en tu vesícula.
- Los cálculos biliares bloquean el conducto del páncreas y lo inflaman.
No sé por qué me me duele la vesícula si ya no la tengo ¿Podría ser otra cosa?
¿Sientes dolor después de que te quitaron la vesícula? Se trata del síndrome poscolecistectomía (después de la colecistectomía) o «dolor de vesícula fantasma», que afecta aproximadamente entre 10 al 15% de personas, tras esta cirugía.
Es como si tu cuerpo estuviera imitando el dolor antiguo de la vesícula, pero tiene otras causas:
- Problemas con el esfínter de Oddi: el músculo que dirige la bilis y el jugo pancreático hacia tu intestino puede tener problemas para funcionar correctamente y provocar dolor en la parte superior derecha de tu abdomen.
- Estenosis papilar: es cuando el conducto que lleva la bilis se encoge, causando dolor después de que te quitan la vesícula.
¿Con qué puedes confundir el dolor de vesícula si ya fue extirpada?
Si ya no tienes la vesícula biliar, pero el dolor abdominal sigue allí, existen otras causas que se disfrazan como dolor de vesícula.
Problemas gastrointestinales:
- Gastritis: si el revestimiento de tu estómago se inflama, puede causar un dolor abdominal similar al dolor de vesícula.
- Úlceras pépticas: son heridas que aparecen en tu estómago o intestino delgado que duelen.
- Reflujo gastroesofágico: cuando el ácido del estómago vuelve al esófago, puede provocar dolor en la zona superior del abdomen, parecido al dolor de vesícula.
Problemas intestinales:
- Síndrome del intestino irritable: es una condición persistente que causa dolor abdominal, hinchazón y alteraciones en tu sistema intestinal.
- Colitis: cuando tu colon se inflama causa dolor abdominal y cambios en tus hábitos intestinales.
- Obstrucción intestinal: es cuando algo bloquea tu intestino, incluso heces, provocando un fuerte dolor abdominal. Si te pasa, corre al médico.
Problemas urológicos:
- Infecciones del tracto urinario: pueden traer dolor en la parte inferior del abdomen capaz de confundirse con el dolor de vesícula.
- Cálculos renales: a veces se forman en los riñones, causando un dolor abdominal muy fuerte en la parte inferior del abdomen.
Problemas musculoesqueléticos:
- Músculos abdominales tensos o lesionados: si te lastimas los músculos de esta zona o los tensas demasiado, puede provocar dolor abdominal.
- Hernia: es un bulto que puede causar dolor o malestar, en especial, cuando te inclinas, levantas peso o presionas el área.
Confusión con dolor de hígado:
- Localización del dolor: el hígado y la vesícula están en el mismo lado de tu barriga. Por eso, el dolor se suele confundir.
- Síntomas parecidos: ambos problemas pueden causarte náuseas, indigestión o cansancio.
¿Qué hacer si no tienes vesícula y te duele?
Mi primera recomendación es asistir a tu médico tratante, mejor si es un especialista de la corriente funcional integrativa, pues no solo se fijará en tus síntomas, sino también en:
- Análisis de estrógenos: si tu estrógeno elevado, puede interactuar con el colesterol y formar cálculos en la vesícula. Esto es común en mujeres que usan anticonceptivos, terapia hormonal y se exponen a xenoestrógenos (químicos que imitan a los estrógenos) en alimentos y ambiente.
- Tu alimentación: lo que comes es importantísimo. Así que podrías necesitar un cambio en tus menús, que te ayude a sentirte mejor. Podrían sugerirte comer menos grasas, evitar alimentos inflamatorios y agregar más alimentos que ayuden a la salud biliar.
- Suplementos nutricionales: tu cuerpo podría necesitar una ayuda extra. Quizás te indiquen suplementos para mejorar la digestión, reforzar la función biliar, o darte un empujón de nutrientes.
- Manejo del estrés: con o sin vesícula, debes controlar tus emociones, en especial, si tienes tiempo estresada por ese dolor después de extraerte la vesícula. Si deseas técnicas para controlarlo, haz clic aquí.
Consentida, si tienes alguna duda adicional, escríbeme para ayudarte.
Importante: este contenido tiene fines educativos y no debe utilizarse como asesoramiento médico. Si tienes alguna condición de salud, consulta con tu médico.
Estudios de referencia