¿Te sientes hinchada, con gases y con molestias abdominales constantes?
¿Además, te han diagnosticado la enfermedad de Hashimoto, mi consentida?
Si es así, posiblemente esta es la respuesta: El SIBO (sobrecrecimiento bacteriano del intestino delgado), una condición común que afecta a mujeres con Hashimoto, y puede empeorar los síntomas de ambas afecciones.
¿Qué es el SIBO?
Imagina tu intestino delgado como un río tranquilo. En condiciones normales, solo hay una pequeña cantidad de bacterias viviendo en él. Pero en el SIBO, este río se llena de bacterias en exceso, creando un desequilibrio que puede provocar síntomas molestos como:
– Hinchazón y distensión abdominal
– Dolor o malestar abdominal
– Diarrea o estreñimiento
– Gases excesivos
– Fatiga
– Deficiencias nutricionales debido a la mala absorción
El diagnóstico de SIBO generalmente se realiza mediante una prueba de aliento con glucosa, que mide la cantidad de hidrógeno y metano exhalados, ya que estos gases son producidos por las bacterias en el intestino delgado.
¿Por qué es más común con Hashimoto?
Las mujeres con tiroiditis de Hashimoto son más propensas a desarrollar SIBO debido a varios factores:
1. Disminución del ácido estomacal: El hipotiroidismo puede reducir la producción de ácido estomacal, esencial para matar bacterias y prevenir el crecimiento excesivo de bacterias en el intestino delgado.
2. Motilidad intestinal alterada: La disfunción tiroidea puede ralentizar el movimiento intestinal, permitiendo que las bacterias proliferen en el intestino delgado.
Y los movimientos lentos del intestino, permiten que las bacterias se acumulen en el intestino delgado, en lugar de ser transportadas al intestino grueso donde normalmente pertenecen.
3. Inflamación sistémica: La inflamación crónica asociada con Hashimoto puede debilitar el sistema digestivo y la barrera o mucosa intestinal, facilitando la colonización bacteriana en áreas no deseadas, con el riesgo de SIBO.
4. Además, algunos medicamentos para la tiroides pueden contribuir al desarrollo de SIBO.
Consecuencias adicionales de SIBO en mujeres con hashimoto
Las mujeres con SIBO y Hashimoto pueden experimentar complicaciones adicionales, como:
Mala absorción de nutrientes: La sobreabundancia de bacterias puede interferir con la absorción de nutrientes esenciales, exacerbando deficiencias comunes en pacientes con Hashimoto, como las de hierro y vitamina B12.
Aumento de la inflamación: Cuando hay un exceso de bacterias en el intestino delgado (SIBO), estas bacterias pueden producir sustancias llamadas endotoxinas que aumentan la inflamación en el cuerpo.
Esto puede empeorar la inflamación general y los síntomas de la enfermedad de Hashimoto.
Tratamiento del SIBO en mujeres con hashimoto
Si tienes Hashimoto y experimentas problemas digestivos persistentes, considera hablar con tu médico sobre la posibilidad de SIBO, consentida.
Un diagnóstico adecuado y un tratamiento dirigido pueden mejorar tu calidad de vida. Los tratamientos pueden incluir:
Antibióticos específicos para SIBO
Dietas específicas, como la dieta baja en FODMAPs (alimentos específicos como algunas frutas, verduras y cereales), para reducir los síntomas y mejorar la motilidad intestinal.
Y los tratamientos integrativos de la medicina funcional.
Consultando con un médico funcional o un especialista en enfermedades autoinmunes y digestivas, se puede desarrollar un plan de tratamiento completo que aborde tanto SIBO como la enfermedad de Hashimoto.
No te rindas, mi consentida, ¡sigue adelante!
Importante: este contenido tiene fines educativos y no debe utilizarse como asesoramiento médico. Si tienes alguna condición de salud, consulta con tu médico.

Referencias:
The Perimenopause Solution: Harper, Shahzadi. The Perimenopause Solution
The Setpoint Diet: Bailor, Jonathan. The Setpoint Diet