“¿Por qué no puedo dormir?”, preguntas desesperada.
¿La frustración supera incluso tu agotamiento, mi consentida?
Sentirse agotada pero incapaz de descansar, es una de las peores experiencias. Pero la medicina funcional ofrece una solución sencilla y natural: un baño con sales de magnesio.
Podrás relajarte y mejorar algunos desequilibrios que podrían contribuir a tu fatiga. No hay excusa, si no tienes bañera usa un barreño y sumerge tus pies y pantorrillas durante 20 minutos, también será efectivo. Entiende en este post por qué funciona.
El papel del magnesio en el cuerpo
El magnesio es un mineral esencial que desempeña más de 300 reacciones bioquímicas en el cuerpo.
Entre sus funciones más importantes se encuentran la regulación del sueño, la relajación muscular y la reducción del estrés. Sin embargo, en muchas ocasiones, sus niveles son insuficientes debido a la dieta y estilo de vida estresante.
¿Cómo me ayuda un baño caliente con sales de magnesio?
“¿Por qué no puedo dormir?” Si quieres olvidar esa pregunta que martillea tu mente, céntrate en la solución. Así es cómo un baño comienza a relajarte:
1. Ayuda a relajar los músculos tensos y a reducir la inflamación. Permite que el mineral sea absorbido a través de la piel, proporcionando alivio casi inmediato a los músculos cansados.
2. Regula la hormona del sueño, la melatonina. Antes de acostarte te ayudará a conciliar el sueño rápidamente y a disfrutar de un descanso más profundo.
3. Reducción del estrés: Es una excelente manera de relajarse después de un día agitado y disminuir la ansiedad. El magnesio tiene propiedades calmantes que pueden reducir los niveles de cortisol, la hormona del estrés.
4. Desintoxicación: Las sales de magnesio, especialmente el sulfato de magnesio (también conocido como sales de Epsom), ayudan a eliminar toxinas del cuerpo, promoviendo una sensación de bienestar general.
Sales de Epsom y sales de cloruro de magnesio
Existen diferentes tipos de sales de magnesio, te recomiendo usar estas:
- Sales de Epsom (Sulfato de Magnesio): Son las más comunes y se conocen por sus propiedades desintoxicantes y relajantes. Son excelentes para aliviar dolores musculares y articulares.
- Sales de Cloruro de Magnesio: Se absorben más fácilmente a través de la piel en comparación con las sales de Epsom, lo que puede ser más beneficioso para aumentar los niveles de magnesio en el cuerpo. Estas sales también son efectivas para la desintoxicación y la relajación muscular.
Cómo preparar un baño con sales de magnesio
Preparar un baño con sales de magnesio es sencillo:
- Llena tu bañera con agua caliente (pero no demasiado caliente).
- Añade 1-2 tazas de sales de magnesio. Puedes usar sales de Epsom, sales de cloruro de magnesio, o una combinación de ambas.
- Remueve el agua para disolver las sales.
- Sumérgete en el baño durante 20-30 minutos.
Para potenciar los efectos, puedes añadir unas gotas de aceites esenciales como lavanda o manzanilla. ¡No podrás resistir tanta relajación y confort!
Consejos adicionales
- Hidratación: Asegúrate de beber suficiente agua antes y después del baño para mantenerte hidratada.
- Frecuencia: Puedes tomar baños con sales de magnesio de 2 a 3 veces por semana para obtener beneficios continuos.
- Alimentación: Complementa estos baños con una dieta rica en magnesio. Alimentos como las espinacas, almendras, aguacates y plátanos son excelentes fuentes de este mineral.
Si estás agotada pero no puedes descansar, dale una oportunidad a esta práctica natural y reconfortante, mi consentida. ¡Tu cuerpo y mente te lo agradecerán!
Y si aún sigues preguntándote «¿por qué no puedo dormir?», consulta tus dudas.
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Importante: este contenido tiene fines educativos y no debe utilizarse como asesoramiento médico. Si tienes alguna condición de salud, consulta con tu médico. Y consulta también antes de comenzar cualquier nuevo suplemento para asegurar que es adecuado para ti.
Referencias:
- Vitti, Alisa. En sintonía con tu ciclo femenino.
- Romm, Aviva. La revolución de la tiroides y las glándulas.