Es un hecho, el estado de tu cuenta bancaria afecta directamente tu paz mental.
Más aún, cuando eres la cabeza del hogar o no tienes pareja que te apoye.
Consentida, si no haces algo para mejorarlo, el estrés financiero se vuelve muy problemático y puede causarte malestares, incluso, agudizar los signos de la premenopausia.
Aquí no te daré un truco para hacerte millonaria, ¡ojalá lo tuviera!, sino tres consejos efectivos para gestionar tu dinero con criterio y recuperar tu equilibrio.
El estrés financiero es real
Angustiarse por dinero es una causa común de estrés, especialmente, en mujeres que hacen malabares para cubrir los gastos: alimentos, pagar cuentas, la ropa de los hijos, etc.
A esto se suma que el estrés después de los 40 años se dispara con la premenopausia.
Todo ello puede encaminarte al estrés financiero que causa problemas de salud física, como migrañas, dolores de cabeza, malestares estomacales, fatiga, hipertensión arterial, etc.
También, afecta la salud mental al causar más estrés, insomnio, ansiedad y depresión. Incluso puede causar estrés de pareja.
3 consejos para manejar el estrés financiero
- Conócete a ti misma y tu relación con el dinero
Para hacerte cargo de tus finanzas, tómate un tiempo para reflexionar sobre esto:
- ¿Cuáles son mis creencias sobre el dinero? Quizás tus padres fueron muy ahorrativos o gastaban a manos sueltas, y tú te reflejas en ellos.
- ¿Qué significa el dinero para mí? Es una herramienta para crecer o una fuente de estrés.
- ¿Cuáles son mis hábitos de gasto? Cómo y en qué gasto el dinero.
- ¿Soy impulsiva al comprar? Date cuenta de si planificas tus compras o eliges algo que se te antoja de repente.
- ¿Compro para sentirme mejor? Sientes que tus emociones se calman después de comprar.
Si las contestas con sinceridad, identificarás patrones negativos y limitantes; desde allí, podrás hacer cambios positivos en tus finanzas.
- Deja atrás el vivir al día y empieza a planificarte
¿Te estresa gastar más dinero del que esperabas, sin saber en qué se fue? Administrar tus finanzas puede ser tan sencillo como contar lo que ganas y gastas.
Así puedes hacer un presupuesto ajustado a tus necesidades, reducir el estrés financiero y tomar mejores decisiones de compra.
También es útil fijarte metas, como dónde quieres estar financieramente el próximo mes o año, ya que te hace consciente de los gastos innecesarios para evitarlos.
Para comenzar, pídele orientación a un asesor, un familiar o un amigo que sepa manejar el dinero de manera inteligente.
- Ahorra, aunque sea un poco
Sé que ahorrar cuesta trabajo porque hay muchos gastos en el día a día.
Pero te voy a dar un consejo que a mí me ayuda mucho: apenas cobres tu sueldo o una factura, aparta una cantidad para ahorrar.
No importa si son solo 5 dólares a la semana; así crearás el hábito y, con el tiempo, te animarás a ahorrar un poco más.
Con eso, te sentirás más satisfecha y segura con tus finanzas, lo que reduce el estrés financiero.
Es más, podrías conectar ese ahorro con el objetivo mensual o anual que te hayas fijado.
Consentida, saber cómo evitar el estrés financiero será un gran alivio para ti y quienes te rodean.
No olvides que combatir el estrés naturalmente con buenos hábitos de alimentación, buen sueño y movimiento, serán el complemento ideal para lograrlo.
Haz clic aquí para conocer el Método en 3 pasos para aliviar el estrés laboral cuando el trabajo te agobia
Importante: este contenido tiene fines educativos y no debe utilizarse como asesoramiento médico. Si tienes alguna condición de salud, consulta con tu médico.
Referencias